En medio de una operación militar en zona rural del departamento de Putumayo, dos integrantes del Ejército Nacional resultaron gravemente heridos tras presuntamente atacados con gasolina incendiados por un grupo de civiles en medio de una asonada. Entre los uniformados afectados se encuentra el soldado profesional Sebastian Diaz Amaya, oriundo de la ciudad de Neiva y el subteniente Miguel Angel Mejia.
Los hechos se registraron en la vereda Siloé, jurisdicción del municipio de Villagarzón, donde las tropas adelantaban una operación contra el narcotráfico, especialmente la destrucción de un laboratorio para el procesamiento de base de coca. De acuerdo con información oficial, durante el procedimiento se habría producido una confrontación con un grupo de personas que, al parecer, intentaron impedir el avance de la operación militar.
En medio de la situación, según reportes preliminares, algunos de los civiles habrían rociado con gasolina a los uniformados y posteriormente les prendieron fuego, causando quemaduras de alta gravedad a los dos militares. El Ejército Nacional activó de inmediato los protocolos de evacuación médica, trasladando a los heridos al hospital de Florencia – Caquetá, y luego a Bogotá, donde actualmente reciben atención especializada en la unidad de quemados del Hospital Militar Central.
El general Erik Rodríguez, segundo comandante del Ejército, entregó declaraciones sobre lo ocurrido y calificó los hechos como un acto de extrema violencia contra la fuerza pública. Además, anunció que las autoridades han ofrecido hasta 200 millones de pesos de recompensa por información que permita identificar y capturar a los responsables de ataque.




