Durante la Comisión Electoral, Petro denunció un posible vínculo entre la Policía y el atentado contra el senador Miguel Uribe en Bogotá. Según el mandatario, la infiltración en las instituciones de seguridad del Estado es real y profunda.
“El esquema de seguridad de Uribe Turbay fue reducido de manera extraña”, señaló Petro. Posteriormente, fue más contundente al declarar que “la Policía está fuertemente infiltrada y todos, nosotros también”. Reveló, además, que en reuniones de la llamada «Junta del Narcotráfico Bogotano» participa un funcionario del Estado cuya identidad aún está por establecer.
Petro también denunció la presencia de un cuerpo de inteligencia extranjero en una reunión en Panamá, lo cual, según él, forma parte de una estrategia más amplia para generar caos y dividir al país. “Alguien está buscando pescar en río revuelto. Esa persona o grupo va a volver a actuar, porque esto es un juego de carambolas que busca debilitar el Estado y su credibilidad”, advirtió el jefe de Estado.
Preocupación por patrón de violencia política
El ministro del Interior, Armando Benedetti, respaldó las declaraciones del presidente y elevó aún más la alerta. Según Benedetti, lo ocurrido con el senador Uribe podría ser apenas el inicio de una cadena de atentados dirigidos a figuras políticas. “Estamos ante un posible patrón de violencia. Esto puede ser el primer eslabón de una serie de atentados terroristas o intentos de asesinato. Muchos siguen jugando a ser candidatos sin dimensionar el riesgo”, afirmó.
Ambos funcionarios instaron a las autoridades a reforzar la seguridad y a identificar a los posibles infiltrados para evitar una escalada de violencia política en el país.




