Cuando Trump presentó la demanda por difamación a principios de esta semana, reclamando US$ 15.000 millones en daños y perjuicios, numerosos expertos legales declararon a CNN que la acción carecía de fundamento y que parecía más una maniobra publicitaria que un caso serio.
Un portavoz de The New York Times dijo que “acogen con satisfacción la rápida decisión del juez, que reconoció que la demanda era un documento político y no una presentación legal seria”. El jueves, el editor ejecutivo del periódico, Joe Kahn, declaró en un evento de Axios que Trump se equivocó en los hechos y en la ley en lo que respecta a la difamación. “Lucharemos y ganaremos”, afirmó.
En un fallo cargado de burla, el juez federal Steven D. Merryday, del Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito Medio de Florida, rechazó la demanda, alegando que la confusa presentación de 85 páginas no cumplía con las normas federales para demandas civiles. Según explicó, la Regla 8 exige una “declaración corta, sencilla y directa de los hechos alegados”, algo que el escrito de Trump no cumplía.
El magistrado advirtió que la denuncia no debe convertirse en “un foro público para vituperios e invectivas” ni en “un megáfono para las relaciones públicas”. Además, ordenó que, si el equipo legal del expresidente desea volver a presentarla, debe limitarla a 40 páginas o menos en un plazo de cuatro semanas.
La demanda, que acusaba a The New York Times de actuar como “vocero virtual” del Partido Demócrata, también nombraba como demandados a Penguin Random House y a cuatro reporteros del diario, incluidos dos que escribieron un libro titulado Lucky Loser: Cómo Donald Trump Dilapidó la Fortuna de su Padre y Creó la Ilusión del Éxito. Por momentos, el escrito se leía como un artículo de opinión a favor de Trump, repleto de elogios al expresidente y referencias a sus pleitos contra otros medios.
El equipo de Trump aseguró que presentará una versión revisada. “El presidente Trump continuará responsabilizando a las Noticias Falsas a través de esta demanda poderosa contra The New York Times, sus reporteros y Penguin Random House, de acuerdo con las indicaciones del juez sobre la logística”, dijo un portavoz.
La gente pasa junto al edificio de The New York Times en Nueva York el 16 de septiembre de 2025.
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