Por medio de panfletos estarían amenazando a los guardianes del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) que se encontraban en la cárcel de Tuluá, en el momento del incendio que causó la muerte de 54 presos.
En el documento afirman que los guardianes que «participaron en la masacre«, se les declaró como «objetivo militar» y que les da 72 horas para que salgan del municipio.
“Ellos participaron y se aliaron con alias Brayan y Miller para cometer este acto inhumano, se les advirtió por Facebook y hicieron caso omiso al llamado, por lo tanto, le damos 72 horas para que salgan de nuestra ciudad al dragoneante HAYALA y a su cúpula de asesinos que participaron el día de las muertes, los dragoneantes CRUS, MARIN Y al teniente OROZCO alias chuky», se lee en el panfleto.
De igual forma, aseguran que saben dónde viven el 80% de la guardia y sus familiares, a quienes también van a tomar acciones militares en su contra.
La misiva finaliza diciendo que «trasladaron a nuestro papá otra vez gracias a ustedes y por petición de los sindicatos de Tuluá, y esto no se va a quedar así, ya le hemos probado atentando contra ustedes y lo volveremos hacer. A la población civil se le hace un llamado para que tenga cuidado porque no queremos que paguen inocentes por esos corruptos del Inpec«.
Según conoció Semana, estas amenazas fueron puestas en conocimiento de la Fiscalía y este lunes las directivas de la cárcel se reunirán con los guardianes del Inpec amenazados para definir si son trasladados a otras cárceles.
