Según trascendió en medios judiciales de Cali, Colombia, Juan Sebastián Triana Alzate, estudiante universitario, debió abandonar el país por retaliaciones y amenazas contra su vida por sus actividades de apoyo en años anteriores y la continuidad de estas, dando total respaldo a la trayectoria de su abuelo Hans Arlinson Triana.
Como es de conocimiento ciudadano, el abuelo de Sebastián Triana fue asesinado a mediados de 2018, en tiempos en que, acompañado de su nieto, cumplía labores como comerciante, líder social, político y comunal.
Según relata el universitario amenazado, “nuestra labor social se cumplía en barrios de Siloé, Lleras, Cortijo, sectores de familias vulnerables, en situación de riesgo frente a la delincuencia, consumo y micro comerció de psicoactivos en Cali y en los barrios Panorama, La Huecada, San Jorge y otros de la comuna uno, además del sector de la plaza de mercado de Yumbo, carreras segundas, primera y Alambique”.
Como consecuencia de estos hechos, dice Sebastián, “nuestro intento de alejar a muchos jóvenes del microtráfico, tanto mi abuelo como yo, fuimos rechazados por no estar de acuerdo con bandas crimínales y la guerrilla del ELN. Esto hizo que el trabajo social de mi abuelo Hans lograra que muchas personas se alejaran de esa guerrilla, y como resultado mi abuelo fue declarado objetivo militar y asesinado. Quise continuar el legado del abuelo, pero fui presionados por este grupo rebelde a abandonar el sector o causarme la muerte, por lo cual salí del país”.
Según denuncia Sebastián, “regresé a los cuatro años, en la comuna 20 de Cali quise continuar persuadiendo a jóvenes de rechazar al ELN, pero fui amenazado por sujetos armados, debí salir del país. Pero antes, denuncié mi situación a la fiscalía, pero no logré garantizar mi protección, fui perseguido por dos sujetos que me llamaban por mi nombre. En mi huida, usaron armas de fuego para matarme, reaccioné rápido, salté un muro para protegerme. Ellos manifestaron tener orden de asesinarnos a mí y a mi familia, por no apoyar al ELN y sus ideales. Debí salir del país”.



