Una nueva polémica se desató en el Congreso tras los señalamientos de la representante del Pacto Histórico, María Fernanda Carrascal, contra el congresista de oposición Miguel Polo Polo. La discusión surgió luego de que Carrascal cuestionara públicamente la inasistencia de Polo Polo a una importante sesión de la Comisión Primera de la Cámara, en la que se eligió la nueva mesa directiva.
La representante publicó en sus redes sociales información sobre las actividades sociales del congresista durante el fin de semana, insinuando que se ausentó por motivos ajenos a sus funciones legislativas. En respuesta, Polo Polo emitió un comunicado dividido en cuatro puntos, en el que defendió su derecho a la vida privada y lanzó una fuerte pregunta: “¿Me están haciendo seguimiento?”.
El congresista también aclaró los motivos de su ausencia, afirmó que no está obligado a dar explicaciones sobre su tiempo libre y acusó a Carrascal de perseguirlo políticamente. “No tengo por qué rendirle cuentas sobre mis actividades personales a una colega que confunde control político con vigilancia personal”, afirmó.
La disputa ha generado múltiples reacciones en redes sociales, donde se intensifica el debate sobre los límites entre lo público y lo privado en la vida de los funcionarios. Mientras tanto, la tensión entre miembros del Congreso continúa escalando en medio de un ambiente legislativo ya cargado de confrontaciones ideológicas.
