Fallas en la seguridad del exprimer ministro de Japón, Shinzo Abe, fue la explicación que dio la policía taras el magnicidio del primer ministro y quién fue asesinado de un disparo en la espalda por un exmarinero que quiso así manifestar su inconformismo. El hecho ocurrió en Nara y mientras Abe estada dando un discurso previó a las elecciones a la Cámara Alta que se realizarán este 10 de julio.
«No podemos negar que hubo problemas con el plan de seguridad dado cómo terminaron las cosas», sostuvo en una rueda de prensa el jefe de la Policía de la prefectura de Nara, Tomoaki Onizuka.
Agregó «Siento un gran sentido de la responsabilidad»
El funcionario aseguró que la institución analizará con exactitud qué salió mal e implementará los cambios necesarios.
La prensa local informó que el sospechoso, identificado como Tetsuya Yamagami, de 41 años, le había dicho a las autoridades que creía que Abe estaba vinculado con un grupo religioso al que culpaba de arruinar económicamente a su madre y destruir su familia.
No obstante, las autoridades aún no han identificado al grupo religioso al que se refiere el hombre arrestado en el lugar de los hechos, pocos segundos después de disparar.
Los investigadores han logrado establecer que Yamagami también había visitado otros lugares donde Abe había hecho apariciones de campaña, incluida la ciudad de Okayama, a más de 200 km de Nara, según reportaron medios japoneses.
Quién es Tetsuya Yamagami:
Tetsuya Yamagami, era un residente de Nara y había trabajado en las Fuerzas de Autodefensa Marítima de Japón durante tres años. El hombre tras cometer el crimen intentó huír pero fue capturado por los escoltas.
Estaba desempleado y según la policía se investiga si estaba actuando solo.
El sospechoso dijo que guardaba rencor contra una «organización específica» y que creía que Abe formaba parte de ella, y que su rencor no tenía que ver con la política.
La policía investiga el grupo religioso al que se refiere.



