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Diversos negociantes de Trump en los Balcanes generan polémica. ¿Qué personajes son y qué función desempeñan Richard Grenell, Jared Kushner (el heredero de Trump) y el enigmático Rod Blagojevich?
«The New York Times (NYT) titulaba «El negociador principal ha vuelto», en la primera semana de la segunda presidencia de Donald Trump en Estados Unidos: «The Chief Deal Maker is back». La expresión también ilustra la política exterior de Trump hasta ahora.
Según Trump, esto implica que Ucrania debe continuar recibiendo asistencia militar de Estados Unidos, a cambio de otorgarle a Estados Unidos acceso a sus reservas de materias primas, tales como tierras raras y litio. O la «conquista» de la Franja de Gaza con el objetivo de establecer una «Riviera del Medio Oriente».O el clásico de Trump: una renovada Torre Trump, en esta ocasión situada en la capital serbia, Belgrado.
El proyecto, que no tuvo éxito en 2012, ahora está a punto de iniciar su edificación. Esto sucede, 13 años después, principalmente debido a Richard «Ric» Grenell, el asesor más cercano de Donald Trump, quien ya fue enviado especial del presidente de Estados Unidos para los Balcanes Occidentales durante su primer mandato y a quien Trump ha designado como su «enviado para misiones especiales».
Grenell sostiene vínculos sólidos, incluso cordiales, con el mandatario de Serbia, Aleksandar Vucic, y su ministro de Exteriores, Marko Djuric, quien anteriormente fungió como embajador de Serbia en Washington. En 2023, Grenell fue galardonado por Vucic por su «enfoque balanceado» hacia el Estado más joven de Europa, la República de Kosovo, que Serbia aún reclama para sí, 26 años tras el término de la guerra de Kosovo.
Según el New York Times, el yerno de Trump, Jared Kushner, junto a inversores árabes, rubricaron el pacto para la Torre Trump en Belgrado, cuyo valor se eleva a 500 millones de dólares.
El edificio histórico del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Serbia (ex Yugoslavia) se convertirá en un complejo hotelero con apartamentos de lujo y un monumento en memoria de las víctimas del ataque aéreo de la OTAN de 1999, momento en el que se logró el ataque. Esta se convertiría en la quinta Torre Trump a nivel global, sumada a las de Nueva York, Chicago, Manilla y Estambul.
