El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) confirmó que el presidente Gustavo Petro autorizó el traslado de nueve cabecillas de bandas criminales de Medellín al evento realizado en La Alpujarra el pasado 21 de junio, decisión que ha generado un amplio rechazo y consternación en la opinión pública.
Los líderes criminales, condenados por delitos como narcotráfico y homicidio, no solo asistieron al acto, sino que fueron ubicados en primera fila e incluso algunos participaron desde la tarima como voceros de las estructuras ilegales. Entre ellos se encontraban reconocidos capos como Juan Carlos Mesa Vallejo, alias ‘Tom’, y José Leonardo Muñoz, alias ‘Douglas’.
El Inpec explicó que los traslados se realizaron mediante resoluciones emitidas a solicitud directa de la Presidencia, que designó a los reclusos como representantes autorizados de sus respectivas organizaciones en el marco de un intento de diálogo con estructuras armadas urbanas.
El episodio ha generado una fuerte controversia nacional, con sectores que critican duramente la exposición pública y el aparente reconocimiento de figuras criminales en un espacio institucional. Líderes políticos, organizaciones de víctimas y ciudadanos han cuestionado el mensaje que este tipo de actos envía a la sociedad y a las fuerzas del orden.
Desde el gobierno, aún no se ha emitido una declaración oficial en respuesta a las críticas, aunque previamente el presidente Petro ha defendido su política de «paz total», que incluye el diálogo con estructuras armadas y organizaciones criminales para buscar desmovilizaciones voluntarias.
