En medio de una creciente tensión por su férrea política migratoria, el gobierno de Donald Trump ha generado una nueva y profunda controversia al difundir un cartel que califica a los inmigrantes como “invasores extranjeros”. La imagen, compartida en las cuentas oficiales de la Casa Blanca y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), utiliza la icónica figura del Tío Sam para instar a los ciudadanos a denunciar a la comunidad indocumentada.1
El mensaje del afiche es directo: “Ayude a su país… y a ti mismo… denuncie a todos los invasores extranjeros”, e incluye un número telefónico para reportar personas ante el ICE.2 La polémica se intensificó al descubrirse que el autor del cartel es un usuario de X que se describe a sí mismo como un supremacista blanco y creador de “propaganda de guerra”, quien se mostró orgulloso y sorprendido de que su retórica llegara a las más altas esferas del poder.
Esta acción se enmarca en un contexto de protestas ciudadanas contra las redadas masivas del ICE en ciudades como Nueva York y Los Ángeles, y se alinea con la meta de la administración de alcanzar unas 3.000 detenciones diarias. Figuras como el abogado de inmigración Aaron Reichlin-Melnick han expresado su alarma, afirmando que “este país está en serios problemas” ante la adopción de mensajes extremistas por parte de las autoridades federales.




