Gerard Piqué y Clara Chía Martí reaparecieron públicamente en León, España, tras semanas de intensos rumores sobre una posible separación, siendo escoltados por la Policía Nacional al salir de un reconocido restaurante debido a la reacción explosiva de una multitud de aficionados que los esperaba.
La pareja había asistido a un partido del FC Andorra, equipo propiedad del ex-defensor del Barcelona, en lo que representó su primera aparición conjunta después de las especulaciones mediáticas que sugerían una crisis profunda en su relación sentimental.
El momento más tenso se vivió a la salida del establecimiento, donde una multitud de seguidores reaccionó de forma «mixta» según testigos: mientras algunos los abuchearon e insultaron con gritos hostiles, otros los aplaudieron y mostraron su apoyo a la controvertida pareja.
La necesidad de escolta policial evidencia el nivel de polarización que genera esta relación en España, especialmente entre fanáticos del Barcelona que aún no perdonan la forma en que Piqué manejó su separación de Shakira y su posterior romance con la joven catalana.
Esta reaparición pública buscaría desmentir los rumores de ruptura que habían circulado intensamente en medios españoles, aunque la hostilidad de parte del público demuestra que la pareja sigue siendo objeto de controversia y rechazo en ciertos sectores de la sociedad española.
