EL CRIMINAL
Andrés Felipe Marín Silva, alias Pipe Tuluá, líder de la banda criminal La Inmaculada, peligroso delincuente al que se le atribuye ordenar 46 homicidios, siendo efectivos 39, no habría dejado de delinquir desde que fue capturado en 2015, pues se ha conocido su participación en atentados contra miembros de la fuerza pública, funcionarios públicos, trabajadores del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, Inpec; y los recientes asesinatos de concejales de Tuluá.
LAS AMENAZAS
“Espero que la guardia tenga claro quién soy yo, llegué a mandar como lo he hecho en todas las cárceles y espero que nadie se meta en mi camino porque no temblará la mano para seguir matando guardianes. No me importa si tengo que matar capitanes, cabos, dragoneantes”, dijo el delincuente al llegar a la cárcel La Picaleña en Ibagué.
LOS PRIVILEGIOS
En un acta de entrega se especificaban más de 120 artículos de todo tipo para Pipe Tuluá, en los que se destacaban detergentes, papel higiénico, loza, utensilios de aseo, recogedores, escobas, toallas de baño, servilletas, papas, carne, pollo, chicharrones, chontaduro, jamón, costillas, cavas de icopor, gaseosas, buñuelos, zanahorias, ollas, licuadora, chocolatera, televisores, ambientadores y hasta cuchillos de cocina. Esto, en lapsos de entrega cada ocho días.




