En el corazón de la cordillera, entre la frontera huilense y el departamento del Caquetá, la comunidad de Santana Ramos alza su voz. Desde hace casi tres semanas, los habitantes de esta zona rural están incomunicados por el taponamiento total de la única vía que conecta con el municipio de Algeciras, su principal punto de abastecimiento y comercio. La emergencia, según denuncian, no ha sido atendida por las autoridades competentes de Caquetá, ni por los entes de gestión del riesgo.
Objetivo
Jhonatan Ruiz, presidente de la Junta de Acción Comunal de Santana Ramos, encabeza la movilización pacífica que llegó hasta Algeciras con un solo objetivo: ser escuchados. “Estamos hablando de más de 5.000 kilos de queso y 3.000 de lulo que se están perdiendo, citas médicas que no se han podido realizar, transporte público detenido y familias sin alimentos”, denunció Ruiz, visiblemente preocupado.
A pesar de pertenecer al municipio de Puerto Rico, Caquetá, la comunidad mantiene una relación directa con Algeciras. Allí venden sus productos, compran insumos y acceden a servicios básicos. Por eso, a pesar de que reconocen el apoyo que ha brindado la administración algecireña, insisten en que el Gobierno de Caquetá debe actuar de inmediato.
“Entendemos que Algeciras ha hecho gestiones ante Invías y ha intentado colaborar. Pero hay un tramo que sí corresponde al Huila, y ese también necesita intervención”, señaló el líder comunitario, quien además reveló que, ante la ausencia estatal, lograron contratar una máquina particular que apenas funcionó tres días antes de que la lluvia borrara todo avance.
El drama se intensifica al conocer que más de 25 veredas y cerca de 500 familias están siendo afectadas directamente. Dos vehículos de transporte público de la empresa Cotras Huila permanecen atrapados por deslizamientos, y parte de la carretera fue literalmente arrasada por la montaña.
La caminata de protesta llegó hasta la Alcaldía de Algeciras, donde esperaban reunirse con Planeación Municipal. “Lo que pedimos es una respuesta concreta. No podemos esperar más gestiones que se demoran semanas. Necesitamos maquinaria amarilla ya”, recalcó Ruiz.
