El presidente de Colombia, Gustavo Petro, lanzó este sábado una dura advertencia al mandatario de los Estados Unidos, Donald Trump, durante su intervención en la III Cumbre Social de los Pueblos de Latinoamérica y el Caribe, celebrada en la ciudad de Santa Marta (Colombia). Con la metáfora “no despierten al jaguar”, Petro criticó las operaciones militares estadounidenses en aguas del Caribe y del Pacífico que, según su versión, han atacado lanchas acusadas de narcotráfico pero que habrían ocasionado la muerte de más de 70 personas sin vínculos confirmados con el crimen organizado.
Contexto del conflicto
De acuerdo con el mandatario, los recientes ataques de la fuerza naval estadounidense habrían detenido embarcaciones en la región caribeña con el argumento de combatir el narcotráfico. Petro aseguró que hasta ahora no se ha identificado ni un solo ‘narcotraficante’ entre los más de 70 fallecidos en estas intervenciones.
El gobierno colombiano sostiene que estas operaciones se habrían llevado a cabo sin consulta previa a Colombia, lo cual —según Petro— vulnera la soberanía nacional.
La advertencia y el simbolismo
“¿Por qué no organizamos … los comités de la Constituyente entre los tres o cuatro países que formamos la Gran Colombia?”, planteó Petro, aludiendo a una visión regionalista de unión latinoamericana.
En su intervención, reclamó un trato de tú a tú con Estados Unidos: “aún se puede hablar”, dijo, “pero debe ser entre iguales y sin arrodillarse”.
Y lanzó la frase contundente: “No despierten al jaguar”, al tiempo que advirtió al mandatario de EE.UU. y al secretario de Estado, Marco Rubio, de que “cuidado, están atravesando el Caribe de los libertadores, se están metiendo con la patria de Bolívar”.
Aspectos diplomáticos y acusaciones mutuas
El contexto diplomático entre ambos países atraviesa un momento crítico. En semanas previas, Donald Trump había acusado a Petro de ser “un líder del narcotráfico” y de promover la producción de drogas masiva en Colombia, lo que llevó a la suspensión de parte de la ayuda estadounidense al país.
Petro respondió afirmando que Trump está siendo “engañado por sus logias y asesores” y reafirmó su disposición al diálogo, siempre y cuando sea con respeto a la soberanía de Colombia.
Implicaciones y riesgo de escalada
La declaración de Petro abre una nueva fase en las relaciones entre Colombia y Estados Unidos, que podrían verse afectadas en varios frentes:
- Soberanía marítima y jurisdicción en aguas del Caribe y Pacífico, donde Colombia reclama mayor participación y control.
- Cooperación antinarcóticos, ya afectada por la acusación de EE.UU. contra Petro y la suspensión de ayudas.
- Visión geopolítica regional, con el mandatario colombiano llamando a una articulación de países latinoamericanos en función bolivariana.
- Riesgo de escalada militar o diplomática, si se interpretan los ataques como acciones unilaterales que violan el derecho internacional o soberanía de los estados.
¿Qué viene ahora?
Petro pidió que los ataques cesen inmediatamente y exigió claridad sobre los muertos y las operaciones. Asimismo, reiteró que Colombia puede hablar, pero sólo “entre iguales”. Por su parte, queda por ver cómo responderá Washington: si mantendrá su postura militar y de sanciones o si abrirá un canal de negociación para evitar un deterioro mayor de vínculos.
Las próximas semanas serán clave para observar si este episodio marca un viraje en la política exterior colombiana, en el combate al narcotráfico y en las dinámicas de poder regional en América Latina.




