En medio del revuelo nacional generado por la condena judicial al expresidente Álvaro Uribe Vélez por presunta manipulación de testigos, el presidente Gustavo Petro se pronunció asegurando que, como jefe de Estado, su responsabilidad es garantizar que se respeten los derechos fundamentales de todos los ciudadanos, incluido su antecesor. “Me corresponde protegerlo en lo que dicta la Constitución: el debido proceso y el derecho a la defensa”, afirmó el mandatario durante una alocución desde la Casa de Nariño.
Petro enfatizó que su gobierno no utilizará el aparato judicial para perseguir adversarios políticos y llamó a todos los sectores del país a actuar con mesura y apego a la institucionalidad. “No podemos permitir que este caso se convierta en una herramienta para polarizar aún más al país”, señaló. Mientras tanto, el expresidente Uribe ha reiterado su inocencia y anunció que apelará la decisión, mientras sus seguidores preparan nuevas manifestaciones en su respaldo.
