El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha causado revuelo tras afirmar públicamente que un multimillonario, cuya identidad aún no ha sido confirmada, está intentando llevarse a los descendientes de los famosos hipopótamos de Pablo Escobar, que actualmente habitan en la región del Magdalena Medio. El mandatario expresó su preocupación por este nuevo intento de trasladar a los animales, argumentando que sería una acción irresponsable y peligrosa tanto para los hipopótamos como para el ecosistema local.
«Es increíble que, después de tantos años de debate y esfuerzos para controlar la población de estos animales, ahora haya un interés por llevarlos fuera del país. Este multimillonario parece ver a los hipopótamos como una especie exótica y de lujo, pero la realidad es que no son animales que deban ser tratados como mascotas o trofeos», señaló Petro en una conferencia de prensa.
Los hipopótamos llegaron a Colombia en la década de 1980, cuando Pablo Escobar, el infame narcotraficante, los trajo al país para formar parte de su zoológico privado. Tras la caída de Escobar, los animales fueron dejados en libertad y, con el tiempo, su población ha crecido de manera descontrolada, convirtiéndose en una especie invasora en varios ecosistemas colombianos.
En los últimos años, las autoridades y grupos ecologistas han intensificado los esfuerzos para controlar la población de los hipopótamos, dada la preocupación por los efectos negativos que esta especie podría tener en la fauna y flora local. Sin embargo, el tema ha generado un fuerte debate en el país, con algunos defendiendo la conservación de los animales, mientras que otros argumentan que su presencia representa una amenaza para los ecosistemas.



