Las mujeres que trabajan por la seguridad del Valle del Cauca

[responsivevoice_button voice="Spanish Latin American Male" buttontext="Escuchar Noticia"]
Compartir en

«No vamos a ceder en la lucha frontal contra la criminalidad», fue una de las frases que al termino de un consejo de seguridad en Tuluá, centro del Valle del Cauca, dijo la gobernadora, Dilian Francisca Toro, la mujer que por segunda vez, en su carrera política, asumió las riendas de uno de los departamentos geográficamente más estratégicos del país.

Esta afirmación no es extraña para los vallecaucanos que desde la década de los 90´s han seguido la carrera política de la médica, quien en la más reciente encuesta Guarumo ocupó el primer lugar en el Ranking Nacional de Impacto Digital de los Gobernadores, en donde el 17,8% de los encuestados coincidió en reconocer el trabajo por el bienestar de los residentes del departamento del suroccidente colombiano.

Para esta profesional de la salud que inició como concejal en su natal Guacarí, los problemas o dificultades son oportunidades de emerger de entre las cenizas como el Ave Fénix, por eso desde el 2 de enero de este año empezó a recorrer el territorio escuchando a los habitantes y comprendiendo que la construcción de país no es desde la comodidad de una oficina, sino desde el sentimiento de la persona de a pie.

“Para generar buenos resultados e impactos positivos tenemos que actuar integradamente, pues lo importante son los objetivos y las metas. Las estrategias serán articuladas para poder dar cumplimiento a esos objetivos y esas metas, por eso es tan importante tener presente que no vamos a trabajar en muchas oportunidades por sectores, sino que vamos a trabajar de manera articulada y transversal”, explicó la mandataria sobre su modelo de gobierno.

Tal vez, por eso, uno de sus pivotes de mandato está concentrado en la seguridad, un tema de preocupación nacional y en el que se han venido adelantado esfuerzos relevantes, los cuales se ven materializados en las más de 2.029 capturas por diferentes delitos en el Valle. Sin embargo, su apuesta principal está en devolverle la tranquilidad a esos municipios que han venido viviendo en el temor.

En esta misión de recuperar la esperanza entre los habitantes del Valle del Cauca, la acompaña Ana María Sanclemente, secretaria de seguridad y convivencia, una arquitecta que utiliza sus conocimientos para cimentar entre los ciudadanos la confianza en la institucionalidad.

Esta mujer, natural del municipio de Dagua, localidad de la que fue alcaldesa, no es ajena a la labor social que desde la política se puede ejercer, pues ha crecido con el ejemplo de su mamá, quien en la localidad es una de las personas más queridas por su disposición para ayudar al que más lo necesita.

Tal vez, por eso, resulta significativo observarla al realizar visitas en el territorio, en donde, en ocasiones, hace al lado su agenda y de manera cordial escucha a las personas y comparte con los niños. Todo un ejemplo de resiliencia, teniendo en cuenta que pase a los duros golpes que ha tenido que vivir a nivel familiar sigue adelante en la exigente labor de sacar adelante el bienestar de los vallecaucanos.

De esta manera, se pueden describir estas dos mujeres que con decisión y coraje se ‘echaron’ a sus espaldas la trabajar por el bienestar de los vallunos.

Compartir en