En el municipio de Florida, Valle, un pueblo marcado por la violencia y el miedo, el joven ingeniero electrónico y soldador llamado Stevan Cabal Girón, y su esposa, Astrid Lorena Lopez Bejarano, iniciaron su camino llamado “Innovación y Cambio”, un emprendimiento empresarial con el cual buscaban ayudar a la comunidad con la capacitación de jóvenes. La idea era empoderar a la juventud, alejándola de las calles y dándoles la oportunidad de construir un futuro mejor. También, Lorena Y Stevan comenzaron a liderar iniciativas de activismo social, organizando talleres y charlas sobre derechos humanos y la importancia de la paz. Sin embargo, su éxito no pasó desapercibido.

Los grupos armados, al ver que su legado de esperanza comenzaba a crecer y a preocupar sus ntereses, decidieron tomar cartas en el asunto. Así, se comenzaron a difundir amenazas, responsabilizándolos de incitar a la juventud a rechazar la violencia. Mientras regresaban a casa después de una reunión con jóvenes emprendedores, fueron atacados. Un grupo armado al parecer del Eln emboscó su vehículo, realizando varios disparos al aire para qué pararan, pero la reacción de Lorena fue de maniobrar de nuevo el carro. Por su parte, Stevan dijo que sigue la violencia cada día tomando mayor fuerza en el suroccidente del país.
Se dieron cuenta de que el Estado les había dado la espalda. No había garantías, ni protección, y por ello, se escondieron en un lugar seguro, con la esperanza de seguir en sus luchas, impidiendo que esos grupos se lleven los jóvenes y hasta menores de edad, que terminan en el conflicto que vive el país, donde comenzaron a planear su próximo movimiento. Sabían que no podían rendirse, pero decidieron esconderse en un lugar seguro del país, donde cayeron en cuenta que su única alternativa era abandonar el país




