La emoción del patinaje se vivió con intensidad en Envigado, Antioquia, durante la primera jornada del Campeonato Panamericano que se corre del 19 al 23 de junio. Y fue el Huila quien marcó la diferencia. La delegación departamental, bajo la representación de Utrahuilca, tuvo un debut arrollador, alzándose con más de 20 medallas de oro, más de 10 de plata y una veintena de bronces.
El desempeño de los huilenses no solo los posicionó entre los primeros lugares del medallero general, sino que reafirmó la calidad del proceso formativo deportivo que se viene gestando en el departamento. En cada prueba, los colores del Huila resaltaron, imponiéndose ante delegaciones de todo el continente.
Semillero de campeonas
Entre los grandes protagonistas de la jornada estuvo el municipio de Pitalito, que dejó su huella gracias a cuatro jóvenes patinadoras que conquistaron un total de 10 medallas de oro y una de bronce. Evelyn Celeste Abella, Antonela Camargo Suárez, Ana Victoria Noriega e Isabella Calderón Muñoz demostraron que el talento laboyano no tiene límites.
Estas deportistas, con apenas entre 6 y 8 años, se llevaron elogios y ovaciones tras sus destacadas actuaciones. Su dedicación, disciplina y amor por el patinaje quedaron reflejados en cada competencia.
Las reinas del oro
Evelyn Celeste Abella, de la categoría 7-8 años, logró dos medallas: una de oro en la prueba de reacción 40 metros y una de bronce en los 400 metros zona horaria. Su técnica y agilidad la llevaron al podio con autoridad.
Antonela Camargo Suárez, en la categoría de 6 años, se colgó tres oros: en reacción 40 metros, habilidad y 400 metros zona horaria. Su velocidad sorprendió a propios y extraños.
Ana Victoria Noriega, también en la categoría 7-8 años, fue otra de las grandes figuras con tres preseas doradas, una en cada modalidad: reacción, habilidad y zona horaria. Su dominio fue absoluto.
Isabella Calderón Muñoz, en la misma categoría, igualó la hazaña con tres oros en las mismas pruebas. Su regularidad y constancia marcaron la diferencia.
Un futuro brillante
Las actuaciones de estas niñas no solo les dieron alegrías a sus familias y entrenadores, sino que también encendieron el orgullo de todo el sur del Huila. Desde ya, su ejemplo inspira a nuevas generaciones a soñar en grande y a ver el deporte como un camino lleno de oportunidades.
El Panamericano apenas comienza, pero el Huila ya dejó claro que está para grandes cosas. Y Pitalito, con estas pequeñas gigantes, confirmó que es una cuna de campeonas sobre ruedas.




