Con gran devoción, la ciudad de Pasto celebró la festividad de la Virgen de las Mercedes, patrona del municipio y protectora frente a la amenaza del volcán Galeras. La jornada estuvo marcada por actos litúrgicos, procesiones y un profundo sentido de gratitud hacia la advocación mariana que, según la tradición, ha intercedido en momentos de crisis volcánica.
La Catedral de Pasto fue el epicentro de las celebraciones, donde cientos de fieles se congregaron para participar en la eucaristía solemne presidida por las autoridades eclesiásticas. Posteriormente, la imagen de la Virgen recorrió las principales calles de la ciudad en medio de cantos y oraciones, reafirmando la fe de los devotos.
La tradición recuerda que, en distintos episodios de actividad volcánica, los pastusos han pedido la intercesión de la Virgen de las Mercedes, a quien atribuyen la calma y protección frente al Galeras. Por ello, cada año, la celebración no solo es un acto religioso, sino también una expresión de identidad cultural y comunitaria.
Autoridades locales destacaron que esta conmemoración fortalece los lazos de fe y esperanza en una región marcada por la cercanía con el volcán. Además, se resaltó la importancia de mantener vivas las tradiciones que unen a la comunidad alrededor de sus símbolos de espiritualidad y protección.
