El fiscal del condado de Utah, Jeff Gray, anunció que buscará la pena de muerte para Tyler Robinson, el sospechoso de matar al activista ultraconservador estadounidense Charlie Kirk.
Se conocieron nuevos detalles de Tyler Robinson, tenía una “ideología de izquierda” y vivía con una persona transgénero que era su pareja.
El gobernador Spencer Cox reveló que Tyler convivía con su pareja romántica y un hombre en proceso de transición para convertirse en mujer.
El sospechoso del asesinato del influencer de derecha estadounidense Charlie Kirk será imputado este
Kirk, un cercano aliado al presidente Donald Trump, murió el miércoles durante un evento en una universidad de Utah. Era el fundador del grupo político juvenil conservador Turning Point USA.
Según las autoridades, el sospechoso Tyler Robinson, de 22 años, utilizó un rifle con mira telescópica para matar a Kirk de un solo tiro en el cuello desde un tejado. Fue arrestado después de 33 horas de persecución.
El director del FBI, Kash Patel, ha sido severamente criticado por su gestión tras el crimen, inclusive por anunciar demasiado rápido la captura de otro sospechoso que fue liberado dos horas después.
Patel será interrogado por un panel del Senado, entre otras cosas por su manejo del tiroteo contra Kirk.
La Casa Blanca dijo que perseguirá un supuesto «movimiento terrorista doméstico» de izquierda tras el asesinato del influencer, lo que despertó preocupaciones de que pueda ser utilizado para silenciar a opositores políticos.
En la últimas horas se conoció que la pareja de Robinson está colaborando con la justicia y así descubrir el motivo del crimen.
George Zinn ayudó a escapar a Tyler Robinson:
George Zinn tras el asesinato del joven activista gritó, «Yo le disparé, ahora dispárenme a mí» y de inmediato la policía lo capturó pero solo lo hizo para ayudar a escapara al verdadero asesino, Robinsón.
Ahora será acusado de obstrucción a la justicia y así lo informó noticias Fox13.
Los documentos informan que momentos después de que Kirk recibiera un disparo en el cuello ante miles de estudiantes en la Universidad Estatal de Utah, Zinn se acercó a los agentes de policía gritando.
Zinn siguió afirmando que era él quien había disparado y nunca se le vio un arma.
En medio del pánico los agentes le preguntaron por la ubicación del arma y Zinn se negó a responder.
Mientras lo escoltaban esposado, volvió a decir a la policía “dispárenme».
Zinn solicitó un abogado y confesó que solo lo hizo «para desviar la atención del verdadero tirador»
