Padres de bebé que murió dentro de un carro podrían pagar hasta 50 años de cárcel

El abogado penalista Marlon Díaz, coincidió en que los padres de la menor podrían ser juzgados por homicidio doloso debido a la gravedad de los hechos.
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Abogados y penalistas aseguraron que los padres de la bebé de siete meses que murió tras ser encontrada en un carro mientras se encontraban en un motel de la ciudad de Valledupar (Cesar), podrían enfrentar una pena que oscila entre los 33 y 50 años de prisión, en caso de ser hallados culpables.

De acuerdo con los hechos denunciados, María Camila Mengual Mójica, de 19 años, y Humberto Manuel Olivilla Pineda, de 23, habrían dejado a su hija abandonada en el vehículo e ingresaron al motel Santa Barbará, ubicado en el barrio Doce de Octubre.

Según información preliminar, un trabajador del lugar fue quien alertó que la menor estaba en el auto y al percatarse que no respiraba, la llevó a un centro médico. Los médicos le informaron que ya no tenía signos vitales.

Así mismo, se está evaluando si los padres de la menor se encontraban bajo los efectos de sustancias psicoactivas o consumo de licor, pues también fueron llevados a un centro médico para ser atendidos.

El exdirector del Sistema Penal Acusatorio de la Fiscalía, Camilo Burbano, señaló que los padres de la menor podrían ser procesados por delitos como homicidio culposo u homicidio doloso agravado.

«En este caso podríamos estar frente a un homicidio culposo, que se puede agravar si estaban bajo los efectos de sustancias psicoactivas o licor y la pena que da una pena que va de 4 a 17 años de prisión», dijo Burbano.

Sin embargo, el exfiscal Burbano dijo que no descarta que puedan ser procesados por el delito de homicidio doloso, que sería agravado por tratarse de un menor de edad y por ser los padres, tendrían una pena de 40 a 50 años de prisión.

Por su parte, el abogado penalista Marlon Díaz, coincidió en que los padres de la menor podrían ser juzgados por homicidio doloso debido a la gravedad de los hechos, lo que complica aún más su situación judicial.

«Podemos estar hablando en principio de una adecuación típica de un homicidio culposo agravado por el consumo de sustancias agravantes al abandono de menores o personas indefensas, pero creo que por las circunstancias del caso, por la posición de garantía que tenían la madre y el acompañante respecto a su bebé podemos estar hablando de un homicidio doloso agravado y la pena mínima sería de 33 años», agregó el abogado Díaz.


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