El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, realizó un operativo sorpresa en la cárcel de Pitalito con el objetivo de combatir delitos como la corrupción y la extorsión, y fortalecer la seguridad dentro del centro penitenciario.
La intervención, que sorprendió tanto a los internos como al personal, busca erradicar actividades ilícitas que afectan tanto a los reclusos como a los funcionarios del penal.
Desmantelando actividades ilegales
El operativo fue coordinado por José Ricardo Cruz, director de la cárcel, quien informó que en la acción participaron 70 funcionarios, incluyendo guardias y personal auxiliar.
“Durante el registro, se llevaron a cabo inspecciones minuciosas en diferentes sectores del establecimiento, lo que resultó en la incautación de varios elementos prohibidos, entre ellos nueve celulares”, reveló el funcionario, quien además destacó que, estos dispositivos móviles son comúnmente utilizados por los reclusos para coordinar actividades ilegales tanto dentro como fuera de la prisión.
Otros decomisos
Además de los celulares, se decomisaron otros artículos que no son permitidos en el centro penitenciario, como herramientas que se utilizan para fines delictivos. José Ricardo Cruz explicó que el objetivo principal del operativo es reducir la criminalidad dentro del establecimiento, evitar la extorsión y fortalecer la seguridad en la cárcel, lo que contribuye a la paz y el orden tanto en el ámbito penitenciario como en la comunidad externa.
“Este tipo de operativos sorpresa son fundamentales para el control y la prevención de delitos dentro de las cárceles, y que continuarán realizándose en otros centros penitenciarios para garantizar la seguridad y el bienestar de los internos, el personal y la sociedad”, concluyó el Director.
