En un operativo conjunto realizado por unidades de la Dirección de Investigación Criminal, en coordinación con la Fiscalía y con el apoyo del FBI de los Estados Unidos, se logró la captura de ocho presuntos integrantes de una organización criminal dedicada al tráfico de estupefacientes en Cali, Valle del Cauca, y otras regiones del país. Según las investigaciones, el cabecilla de esta red, conocido bajo el alias «Boyaco», controlaba las operaciones desde la cárcel de alta y mediana seguridad El Barne, ubicada en el municipio de Cómbita, Boyacá.
Indagaciones
Según las indagaciones del ente policial alias «Boyaco», a pesar de estar recluido, dirigía el tráfico de marihuana y otros estupefacientes, así como otras actividades delictivas desde la prisión. Las investigaciones de la DIJIN permitieron establecer que esta organización adquiría la droga en zonas rurales del departamento del Cauca, donde operaban varios de sus integrantes. Posteriormente, el estupefaciente era transportado a distintos puntos de acopio y empaque, siendo uno de los principales centros operativos la ciudad de Cali, donde la organización contaba con la infraestructura para llevar a cabo sus actividades ilegales.
Pruebas
En la capital del Valle del Cauca, la organización disponía de una compleja logística que incluía bodegas para almacenar y empacar la droga, la cual luego era enviada a diferentes departamentos del país. Esta red criminal instrumentalizaba a menores de edad para que participaran en el envío de estupefacientes a través de empresas de mensajería. El Coronel Edwin Masleider Urrego Pedraza, Director de Investigación Criminal, explicó que, se pudo evidenciar que la organización no solo se dedicaba al tráfico de estupefacientes, sino que también utilizaba sus ganancias para realizar pagos de «vacunas» a miembros del GAOR «Dagoberto Ramos».




