Once Caldas resiste en Bucaramanga y muestra la mano de Hernán Darío Herrera
El Once Caldas de Hernán Darío «El Arriero» Herrera sacó un valioso empate sin goles en su visita al Atlético Bucaramanga, en un partido que, aunque careció de emociones en las áreas, dejó en evidencia el carácter competitivo que ha logrado imprimir el experimentado entrenador en su joven plantilla. El equipo de Manizales aguantó la presión del local y sumó un punto que puede resultar clave en el desarrollo del Grupo A.
Desde el planteamiento inicial, Herrera apostó por un bloque medio-bajo que dificultara la elaboración del rival, con jugadores como Kevin Tamayo y Juan Felipe Castaño cumpliendo roles clave en la recuperación y presión zonal. Tamayo, quien además recibió tarjeta amarilla, fue uno de los motores del mediocampo hasta ser sustituido en el complemento. La solidez defensiva se vio reforzada por la buena actuación del arquero James Aguirre, siempre atento para apagar cualquier intento de Bucaramanga.
Uno de los movimientos tácticos más significativos de «El Arriero» fue la incorporación progresiva de jugadores con mayor desequilibrio ofensivo en el segundo tiempo. Ingresaron Luis Francisco Sánchez, Esteban Beltrán y el joven Luis Palacios, quienes buscaron sorprender a una defensa bumanguesa bien parada. Aunque no se logró marcar, el equipo mostró mejorías en la circulación del balón, especialmente por los costados, con la movilidad de Michael Barrios y la velocidad de Pipe Gómez.
El Once Caldas también supo adaptarse al ritmo del partido. Con el ingreso de Mateo Zuleta y la inclusión de Robert Mejía en el mediocampo, Herrera buscó tener más control en la segunda línea, neutralizando los avances de jugadores como Fabián Sambueza y Gustavo Charrupí. La lectura del entrenador fue clara: no arriesgar de más y asegurar un empate fuera de casa que mantiene con vida al equipo en la tabla.
Este resultado deja a Once Caldas con tres unidades en el Grupo A, todavía en carrera por un lugar en la final. Aunque el gol sigue siendo una deuda pendiente, el orden defensivo y el compromiso colectivo reflejan el sello de Hernán Darío Herrera. El «Blanco Blanco» no brilla, pero compite, y bajo la conducción del Arriero, promete dar pelea hasta el último minuto del cuadrangular.




