En el Sector del Estadio Municipal de Girardot.
Una nueva ola de delincuencia sacudió el sector del estadio municipal de Girardot varios delincuentes atacaron vehículos estacionados en las cercanías del recinto deportivo. En el incidente, los sujetos rompieron los vidrios de tres automóviles y sustrajeron pertenencias de valor del interior de los vehículos. Los propietarios de los autos estaban dentro del estadio, supervisando los entrenamientos de sus hijos, lo que dejó sus vehículos desprotegidos.
La comunidad girardoteña ha manifestado su creciente frustración ante la falta de seguridad en la zona, preguntándose acerca de la efectividad de las medidas de control implementadas por las autoridades locales. «¿Qué pasa con la Policía Nacional?», se preguntan los vecinos, quienes no comprenden por qué no se ha podido prevenir este tipo de actos delictivos en un área frecuentada por familias y jóvenes.
Los residentes de Girardot están cada vez más preocupados por la creciente inseguridad que afecta a la ciudad. La sensación de desamparo se ha intensificado, especialmente en áreas públicas que deberían estar protegidas.
El incidente ha provocado una serie de reacciones entre los afectados y la comunidad en general. Los propietarios de los vehículos robados se encuentran en una situación de impotencia, enfrentando pérdidas económicas y un incremento en la sensación de inseguridad personal. Este evento ha resaltado la urgencia de una revisión y mejora en los mecanismos de seguridad en el área.
La ciudadanía exige una mayor presencia y eficacia por parte de las fuerzas de seguridad para garantizar el orden y la tranquilidad en los espacios públicos de Girardot. Las autoridades locales y la Policía Nacional el coronel de Cundinamarca Andrés Serna se enfrentan ahora a la presión ofreciendo soluciones concretas y efectivas para la seguridad de la ciudadanía
