Racing Club de Avellaneda ha oficializado la incorporación de Marcos Rojo como su flamante refuerzo para la presente temporada. El defensor argentino, con una amplia trayectoria en la selección nacional y en el fútbol internacional, regresa a la Liga Profesional con el objetivo de aportar liderazgo, jerarquía y experiencia a la última línea del conjunto académico.
Uno de los detalles más llamativos de su llegada es que Rojo lucirá en la camiseta la inscripción “Marcos R.”, una particularidad solicitada expresamente por el director técnico Gustavo Costas. El entrenador buscó con esta iniciativa diferenciarlo dentro del plantel y, al mismo tiempo, resaltar su figura en el campo de juego. Este gesto ha despertado la curiosidad de los hinchas, que ya se ilusionan con verlo debutar en el Cilindro.
Rojo, de 35 años, viene de cumplir un ciclo exitoso en Boca Juniors, donde conquistó títulos nacionales e internacionales. Su experiencia en clubes como Manchester United y Sporting de Lisboa lo convierten en una pieza de alto valor para Racing, que afronta un calendario exigente con competencias locales y continentales en simultáneo.
Para Costas, la llegada de Marcos Rojo no es solo una apuesta futbolística, sino también un movimiento estratégico para reforzar el liderazgo dentro del vestuario. El DT confía en que el defensor pueda guiar a los más jóvenes y servir como referente en partidos clave, especialmente en instancias decisivas del torneo y en la Copa Sudamericana.
La dirigencia de Racing trabajó en silencio para concretar la operación, evitando filtraciones y asegurando un contrato que contempla objetivos deportivos y cláusulas específicas. El anuncio oficial generó un revuelo inmediato en redes sociales, con cientos de mensajes de bienvenida y expectativa por parte de la hinchada académica.
Con la camiseta “Marcos R.” lista y un proyecto ambicioso por delante, Rojo se prepara para iniciar un nuevo capítulo en su carrera. Racing espera que su aporte en defensa y su personalidad dentro del campo sean determinantes para soñar con títulos y devolver al club al protagonismo que exige su historia.
