El nombramiento de Luisa Fernanda Martínez Paba como nueva Defensora Regional del Pueblo en Boyacá se oficializará en los próximos días, tras cumplir con todos los requisitos legales y administrativos. La abogada, quien hasta ahora se ha desempeñado como secretaria de Integración Social del departamento, asumirá el cargo en reemplazo de Jorge Eliécer Cortés, quien presentó su renuncia irrevocable hace más de un año para postularse a la Cámara de Representantes.

Transición administrativa
Martínez Paba, oriunda de Tunja, llega al cargo tras un proceso de verificación realizado por la Defensoría del Pueblo, que confirmó que cumplía con las competencias y requisitos establecidos en el Manual de Fundaciones por Competencias y Requisitos Mínimos de la entidad. Según la resolución de nombramiento, el cargo está clasificado como de libre nombramiento y remoción, de conformidad con el Decreto Ley 026 de 2014. El actual titular, Jorge Eliécer Cortés, deberá entregar el puesto a más tardar el 15 de diciembre. Aunque su renuncia aún no ha sido aceptada formalmente, Cortés ha manifestado su intención de evitar inhabilidades para su carrera política. En caso de retrasos en la entrega del cargo, un funcionario encargado asumirá temporalmente la dirección de la Defensoría Regional de Boyacá.
Perspectiva
La llegada de Martínez Paba, a la Defensoría Regional también marca un hito para la representación de las mujeres en cargos directivos en Boyacá. Su experiencia en el gabinete departamental y su conocimiento de las problemáticas sociales de la región son vistos como ventajas para asumir esta responsabilidad. La Defensoría del Pueblo espera que este cambio en la dirección regional refuerce la confianza ciudadana en la institución y permita avanzar en la atención de casos sensibles que requieren acompañamiento inmediato. De no completarse la transición antes del sábado, se contempla que un defensor encargado asuma el liderazgo temporal, garantizando la operatividad de la Defensoría Regional. El reto inmediato para Martínez Paba será consolidar su equipo de trabajo y priorizar las acciones más urgentes en defensa de los derechos humanos en Boyacá. La designación de Luisa Fernanda Martínez Paba como nueva Defensora Regional del Pueblo de Boyacá refuerza el compromiso institucional con la defensa de los derechos humanos y la atención a las comunidades vulnerables del departamento.

Reacciones
El cambio en la Defensoría Regional ocurre en un momento clave para el departamento, ya que esta institución juega un rol crucial en la defensa de los derechos humanos y la garantía de acceso a la justicia para los ciudadanos de Boyacá. Luisa Fernanda Martínez Paba asume el reto de fortalecer la entidad y garantizar la continuidad en los programas y proyectos en curso. El proceso de transición se espera sea fluido, aunque persisten inquietudes sobre posibles vacíos administrativos si no se cumplen los plazos establecidos. No obstante, la nueva defensora ha expresado su compromiso con los principios de la Defensoría del Pueblo y su intención de trabajar de la mano con las comunidades del departamento.
La abogada tunjana Luisa Fernanda Martínez, actual Defensora del Pueblo, es reconocida por su destacada trayectoria y su inquebrantable compromiso con el bienestar social en Boyacá. Durante su gestión como Secretaria de Integración Social del departamento, se consolidó como una líder clave en la formulación e implementación de políticas públicas que impactaron de manera positiva a diversos sectores de la población.
Uno de sus logros más notables fue su papel fundamental para que Boyacá recibiera el prestigioso premio ‘Construyendo Sueños’ otorgado por Colombia Líder, que reconoció al departamento como el mejor plan de desarrollo del país. Este galardón fue resultado de una visión estratégica y un trabajo en equipo que buscó transformar las condiciones de vida de las comunidades boyacenses.
Además, Luisa Fernanda Martínez ha llevado adelante una lucha constante contra la violencia de género, demostrando su firme compromiso con la protección de los derechos de las mujeres y la construcción de una sociedad más justa e igualitaria. Su pasión por servir a Boyacá y su entrega a las causas sociales también se han reflejado en su trabajo por la niñez, la adolescencia y la juventud, áreas en las que ha logrado avances significativos gracias a su liderazgo, sensibilidad y capacidad de gestión.
Su paso por la Secretaría de Integración Social dejó un legado de compromiso y resultados que la posicionan como un ejemplo de liderazgo inspirador. Ahora, desde su nuevo rol como Defensora del Pueblo, continúa trabajando con dedicación y entrega, siendo un referente para quienes aspiran a transformar la sociedad a través del servicio público y el trabajo colectivo.




