Nueva York se ha convertido de nuevo en el epicentro de la pandemia de coronavirus en Estados Unidos al detectarse el sábado más de 21.000 nuevos casos.
Se trata de una cifra récord, ya que la variante Ómicron, alimentó una ola de infecciones ya existente en el país y hasta obligó a los teatros de Broadway y a las Rockettes a cancelar sus espectáculos navideños.
Los 21.027 casos registrados este sábado, 18 de diciembre fueron el mayor recuento diario de la ciudad durante la pandemia, según los datos analizados por The Washington Post, aunque los análisis fueron menores en los primeros días.
La preocupación es palpable en las calles, con colas de varios cientos de metros en los últimos días para las pruebas de PCR o de antígeno, que se ofrecen gratuitamente, lo que provoca un retraso de hasta 48 horas en los resultados.
Vax Update:
-94.1% of adult New Yorkers have at least one vaccine dose (CDC)
-81.7% of all New Yorkers have at least one vaccine dose (CDC)
-135,121 doses administered over last 24 hrs
-32,236,194 total doses administered pic.twitter.com/zs12NNRwAQ— Kathy Hochul (@GovKathyHochul) December 18, 2021
Y a pesar de todas estas señales, la gobernadora Hochul lanzó un mensaje de tranquilidad: «Esto no es como el principio de la pandemia. Estamos preparados para el invierno, con herramientas a nuestra disposición», y recordó el trío de medidas más eficaces: vacuna, refuerzo y mascarilla.
Los restaurantes de Brooklyn están cerrando uno tras otro debido al avance de la variante omicrónica del coronavirus y las colas frente a los centros de pruebas del covid-19 crecen cada día: Nueva York teme revivir la pesadilla de 2020, cuando la ciudad fue el epicentro mundial de la pandemia.
Sólo en el barrio de Greenpoint, más de una docena de bares y restaurantes han cerrado temporalmente debido a los contagios de empleados o clientes. Cerca de McCarren Park, unas 30 personas hacen cola frente a una furgoneta médica aparcada que ofrece pruebas rápidas.




