En medio de un panorama político marcado por la desconfianza y la apatía ciudadana, un grupo de jóvenes payaneses ha decidido romper la inercia y convertirse en protagonistas del cambio. Se trata de las Juventudes de Cambio Radical, un movimiento que está impulsando una agenda fresca, participativa y con sentido social, bajo el liderazgo de Hugo Andrés Caicedo, coordinador departamental del partido en el Cauca.

Su propósito es claro: devolverle a la juventud el protagonismo en los espacios de decisión. Con una lista conformada por diez jóvenes comprometidos, el equipo aspira a llegar al Consejo Municipal de Juventud (CMJ) de Popayán, promoviendo causas que conectan con las realidades y aspiraciones de las nuevas generaciones.
“Popayán necesita un cambio con rostro joven”, señaló Hugo Andrés Caicedo, destacando que su grupo representa voces diversas de estudiantes, deportistas, líderes comunales y gestores culturales que buscan transformar la ciudad desde la educación, la participación y el liderazgo social.

Una juventud que escucha, propone y actúa
Las Juventudes de Cambio Radical han recorrido barrios, instituciones y comunas, escuchando de primera mano las preocupaciones de los jóvenes en temas como educación, empleo, salud mental, deporte y cultura. A partir de esos encuentros, han construido una agenda de acción que busca fortalecer la participación ciudadana y abrir caminos reales de inclusión.
“Queremos demostrar que los jóvenes sí podemos hacer política con propósito y transparencia. Nuestro compromiso no es con un cargo, sino con una causa: la transformación de Popayán”, enfatizó Caicedo.
La propuesta de este grupo incluye impulsar programas de liderazgo juvenil, promover espacios de debate y formación política, y fomentar el acceso a oportunidades laborales y académicas.
La cara visible del cambio
La lista está encabezada por Catalina Cuero Cardona y Edwin Julián Manzano Rendón, dos jóvenes estudiantes de Derecho que se han convertido en símbolo del compromiso social y la perseverancia.
Catalina representa la fuerza femenina que lucha por la equidad y el respeto; Julián, conocido como “el hijo del barrio Alfonso López”, encarna la resiliencia de quienes creen que el entorno no define el destino.
Ambos lideran una generación que no se conforma con soñar el cambio, sino que trabaja cada día para hacerlo realidad. Su mensaje es contundente: la juventud payanesa tiene voz, fuerza y visión para construir la Popayán del futuro.




