En un contexto de volatilidad, Bitcoin ha protagonizado un notable repunte, superando nuevamente la barrera de los $100,000 y generando un renovado optimismo en el mercado de criptomonedas. Este impulso alcista, que acumula un crecimiento semanal superior al 8%, se sustenta en una confluencia de factores desde el frente político hasta el ámbito macroeconómico.
Uno de los catalizadores clave de este rally es la inminente toma de posesión del presidente Trump, programada para el 20 de enero. Su conocida postura favorable hacia los activos digitales ha inyectado expectativas de políticas pro-cripto, incluyendo la posibilidad, según reportes, de una declaración oficial de Bitcoin como reserva.
Esta especulación ha resonado entre los inversores, impulsando la demanda y el precio de la criptomoneda. La potencial designación de Bitcoin como reserva oficial por parte del presidente Trump podría marcar un antes y un después en la legitimación de los activos digitales a nivel global.
El flujo de capital institucional también juega un papel crucial. Ayer se registraron entradas significativas en ETFs de Bitcoin, alcanzando los USD 626 millones, lo que sugiere un creciente interés por parte de inversores institucionales en este activo. Este flujo de capital fortalece la perspectiva alcista y valida la creciente adopción de Bitcoin como una clase de activo legítima.
Desde una perspectiva macroeconómica, los datos económicos recientes en EE. UU., que muestran una relativa reducción de las presiones inflacionarias, han alimentado la expectativa de una Reserva Federal menos restrictiva. Se anticipa que la Fed mantendrá las tasas de interés actuales en el corto plazo, pero con posibles señales de una política monetaria más acomodaticia durante la segunda mitad de 2025. Este entorno macroeconómico favorece a activos sin rendimiento como Bitcoin, al reducir el costo de oportunidad de mantenerlos en cartera.
La perspectiva de una Fed menos restrictiva en 2025 crea un entorno propicio para activos como Bitcoin, que se benefician de tasas de interés más bajas, además de también este entorno de menor costo del dinero favorecer a activos asociados al riesgo.
Adicionalmente, la expiración de contratos de opciones de Bitcoin, valorados en USD 2,200 millones, con un interés abierto concentrado en el precio de ejercicio de USD 120,000, refuerza las expectativas optimistas a corto y mediano plazo.
En resumen, el actual rally de Bitcoin se sustenta en una combinación de factores políticos, institucionales, macroeconómicos y técnicos. Si bien existen riesgos, especialmente si las expectativas políticas no se materializan, el panorama general apunta a un fortalecimiento del precio de Bitcoin en el corto y mediano plazo.”




