Bogotá vive una noche álgida de máxima tensión durante el segundo día del paro nacional, con disturbios violentos registrados en las Universidades Nacional y Distrital que han obligado a la intervención masiva de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (UNDMO) en múltiples sectores de la capital.
Los enfrentamientos más intensos se concentran en el sector Y de Yomasa, localidad de Usme, donde la UNDMO mantiene operaciones activas mientras intenta controlar manifestantes que han escalado las protestas hacia actos de vandalismo y confrontación directa con la fuerza pública.
Las universidades públicas se han convertido en epicentros de la violencia, con estudiantes y grupos de encapuchados protagonizando disturbios que han trascendido el derecho a la protesta pacífica para convertirse en enfrentamientos que ponen en riesgo la seguridad ciudadana.
Esta escalada nocturna evidencia cómo el segundo día del Gran Paro Nacional ha perdido el carácter pacífico inicial, derivando en actos de violencia urbana que afectan la tranquilidad de sectores residenciales y obligan a despliegues policiales de emergencia.
Las autoridades distritales trabajan contrarreloj para evitar que los disturbios se extiendan hacia otras zonas de la ciudad, mientras crece la preocupación por el deterioro del orden público en una jornada que prometía ser de protesta social pero ha derivado en confrontación abierta entre manifestantes violentos y la fuerza pública.
