La Oficina del Primer Ministro de Israel ha declarado que alcanzar el objetivo de eliminar a Hamás y mantener cuatro batallones en Rafah es «imposible». En respuesta, ha solicitado al Ejército la evacuación de esta zona estratégica.
La incursión terrestre se proyecta extender a Rafah, mientras Israel intensifica sus operaciones militares en Jan Yunis, destacado bastión de Hamás bajo ofensiva durante más de dos meses. La atención se centra ahora en la parte oeste de la ciudad.
En un asedio que ya lleva 20 días, las fuerzas israelíes mantienen bajo control los dos principales hospitales, Naser y Al Amal. Recientemente, soldados israelíes irrumpieron en ambos centros médicos, resultando en el arresto de ocho miembros del personal, incluyendo cuatro médicos, cuatro heridos y cinco acompañantes de pacientes, según la Media Luna Roja palestina, que administra el Hospital Al Amal.
La organización ha denunciado que durante aproximadamente diez horas, los soldados israelíes registraron y destruyeron dispositivos, equipos y muebles en el hospital. Además, detuvieron, interrogaron, golpearon e insultaron al personal, impidiendo incluso que bebieran agua o utilizaran el baño. La situación hum
