En la vereda Veracruz, del municipio de Alvarado, decenas de niños llevan más de un mes caminando hasta hora y media por trochas y carreteras rurales para poder llegar a su escuela. La ausencia del transporte escolar, producto de retrasos en los contratos de la Alcaldía, tiene en vilo a padres y docentes, quienes advierten que la situación pone en peligro la seguridad y la permanencia de los menores en las aulas.
El secretario de Educación del Tolima, Andrés Bedoya, reconoció que el servicio se interrumpió por demoras en el proceso contractual, el cual incluso fue declarado desierto. “Esperamos que esta o la próxima semana el transporte quede restablecido”, aseguró el funcionario, al señalar que el alcalde ya se comprometió con los padres a garantizar las rutas escolares cuanto antes.
Mientras tanto, los pequeños continúan enfrentando largas caminatas bajo la lluvia y sobre vías en pésimo estado. Algunas familias relatan que sus hijos deben esperar buses intermunicipales que no siempre pasan y regresan a casa agotados, horas después de la jornada.
La comunidad exige una solución inmediata y advierte que, si el servicio no se restablece pronto, aumentará la deserción escolar. “Nuestros niños merecen estudiar dignamente, no arriesgar su vida por falta de gestión”, expresaron los habitantes de Veracruz, cansados del abandono institucional.




