Ocurrió en la comuna Seis de la capital opita, cerca del lugar de residencia del afectado, quien fue agredido violentamente por la comunidad, al ser confundido por un ladrón. Aunque si bien es cierto, el hombre fue sorprendido en flagrancia cometiendo un ilícito, no fue precisamente el del hurto, como lo imaginaban los agresores.
Intentó huir de la autoridad
Según la información conocida por este medio de comunicación, Camilo Andrés Parra Navarro intentaba huir de la autoridad, cuando los oficiales le solicitaron un registro personal en la carrera 33 sur con calle 32 del sector Ladrillo a la Vista de Cuarto Centenario.
Pensaron que era ladrón
La información conocida por este medio de comunicación indicaría que las patrullas del cuadrante 18 adscrito al CAI Timanco, adelantaban planes de disuasión y control sobre el sector, cuando reciben una alerta de la central de radio, donde manifiestan sobre la presencia de un sujeto sospechoso que vestía pantaloneta roja con blanco, sin camisa y un bolso de cintura color negro tipo canguro.
Lo retuvieron
Es así como los activos proceden a llegar hasta la torre seis donde observan al hombre de 23 años con las mismas características aportadas, quien al percibir la presencia policial, se coloca nervioso y emprende la huida.
Fue castigado a golpes
Infortunadamente para el sujeto, cuando corría la comunidad pensó que era un atracador, por lo que los vecinos se unieron para interceptarlo y detenerlo en el segundo parqueadero del sector Ladrillo a la Vista de Cuarto Centenario.
Allí comenzaron a agredirlo a golpes con la intención de lincharlo y enseñarle una lección ante el incremento de la delincuencia, sin embargo, lo que no sabían los agresores, es que no había cometido ningún robo.
Le prestaron ayuda
Las autoridades tuvieron que intervenir con el fin de salvaguardar la integridad de Camilo Andrés, procediendo así mismo a practicarle una requisa, donde le encuentran dos bolsas plásticas con 51 cigarrillos de fabricación artesanal, envueltos en papel blanco con una sustancia vegetal en su interior, que por sus características de color y olor se asemejan a la marihuana.
Con motivos fundados en el artículo 376 del Código Penal colombiano, se procede a su captura para que responda por el delito de Tráfico, Fabricación o Porte de Estupefacientes.



