Conmocionados se encuentran los habitantes del municipio de Tumaco y la región nariñense luego de que se diera a conocer la noticia de que en una masacre registrada al interior de una vivienda ubicada en la provincia de El Guabo en el sector de El Oro en el vecino país de Ecuador en donde perdieron la vida nueve colombianos, tres de ellos residentes en el corregimiento de La Espriella en El Distrito, es decir eran oriundos del departamento de Nariño.
Las tres víctimas eran conocidas como Maicol, Chiquitín y Samo, quien respondía al nombre de Samuel Cárdenas Cortes. Según información preliminar recopilada por las autoridades los occisos habrían llegado entre el pasado 25 y 26 de noviembre al país. Este hecho ha causado gran preocupación entre los residentes ya que los primeros datos indicarían que una de las víctimas fue hallada desmembrada al interior de un saco a tan sólo unos metros de donde se encontraban los demás cuerpos sin vida.
Los fallecidos fueron identificados como Marco Antonio Isves Niemes de nacionalidad ecuatoriana, Samuel Cárdenas Cortés, Alejandro Saiz Poveda, Luis Alpala Alpala, Luis Guillermo Banquet Rivero, Diego David Benavidez Cifuentes, Yostin Riascos Romero, José Miguel Araujo Buila, Alexander Arroyo y Nepomuceno Ramos Madronero, todos de nacionalidad colombiana.
Al respecto las autoridades informaron: “nueve cuerpos abatidos y un kilómetro más adentro había un cadáver que se encuentra completamente desmembrado en un saco. En total serían diez” indicó durante la mañana del domingo a la prensa el coronel Pablo Fajardo, comandante de la Policía en esa zona. Algunos de los cuerpos fueron hallados en el interior de una vivienda mientras que otros yacían sobre una carretera cercana.
Algunos datos recopilados hacen referencia a que en el lugar se habrían hallado casquillos de armas automáticas y un panfleto, pero no hay pistas acerca de los responsables de la masacre. De la misma manera una de las hipótesis manejadas corresponde a que podría tratarse de un aparente ajuste de cuentas a pesar de que se presume ninguno de los fallecidos tenía antecedentes judiciales.
