Napoli logró un triunfo importante en la Serie A al vencer 3-2 a Pisa en un partido cargado de emociones. Los goles de Billy Gilmour al minuto 39, Leonardo Spinazzola al 73 y Lorenzo Lucca al 82 fueron suficientes para contrarrestar los tantos visitantes de M’Bala Nzola desde el punto penal al 60 y de Lorran Lucas en el 90. Un duelo que se mantuvo abierto hasta el último instante, pero que terminó decantándose para los napolitanos.
Las estadísticas reflejan el dominio de Napoli en varios aspectos clave del juego. El conjunto local remató en 18 ocasiones, contra 15 de Pisa, mostrando una ligera superioridad en volumen ofensivo. Ambos equipos, sin embargo, coincidieron en la misma cantidad de disparos al arco: seis cada uno, lo que habla de la efectividad del cuadro visitante para generar peligro con menos control del balón.
En la posesión, la diferencia fue mucho más marcada. Napoli controló el 64% del balón frente al 36% de Pisa, imponiendo su ritmo y marcando la pauta del encuentro. Esa tenencia se tradujo en una circulación amplia: 595 pases completados por los napolitanos frente a 330 de los visitantes, mostrando un contraste claro en la manera de concebir el partido.
La precisión en los pases fue otro punto donde Napoli marcó la diferencia. Con un 89% de acierto en sus entregas, los celestes mostraron orden y paciencia en la construcción, mientras que Pisa se quedó en un 80%, cifra respetable pero insuficiente para resistir la presión constante del rival.
En lo físico y disciplinario, el encuentro también dejó contrastes. Napoli cometió 10 faltas y recibió una sola tarjeta amarilla, mientras que Pisa incurrió en 18 infracciones y vio dos amonestaciones, evidenciando la necesidad de cortar el juego en varias fases para frenar los avances locales.
En cuanto a las jugadas a balón detenido, Napoli dispuso de cinco tiros de esquina contra tres de Pisa, lo que reforzó su superioridad ofensiva. Además, el cuadro celeste cayó una vez en fuera de lugar, mientras que el visitante no registró posiciones adelantadas. Estos detalles demuestran cómo Napoli buscó constantemente profundidad en ataque.
Al final, el marcador de 3-2 refleja la intensidad de un partido donde Napoli fue superior en el control y las estadísticas, pero en el que Pisa nunca bajó los brazos. El conjunto napolitano mostró solidez y eficacia para llevarse una victoria que reafirma su ambición en la Serie A, sumando no solo tres puntos, sino también la confianza de un rendimiento estadísticamente dominante.




