Su historia comienza con la formación de una familia con la llegada de su primera hija y un hijo. Sin embargo, un trágico evento cambió el rumbo de su vida cuando, estando embarazada de seis meses, perdió a su pareja. A raíz de esa situación de estrés y dolor, su hijo nació prematuramente, pero en principio parecía ser un bebé normal.
Historia
El pequeño fue trasladado de inmediato a Villavicencio, donde ingresó a cuidados intensivos para realizarle una colostomía. Su condición, sin embargo, se complicó: sufrió una especie de pre-infarto y entró en coma. Después de ocho días, el niño despertó, pero su situación era delicada. Los médicos detectaron que tenía problemas en los ductos del corazón y los pulmones, y decidieron remitirlo a la Clínica San Rafael en Soacha, Bogotá.
Complicaciones
Durante tres meses en Bogotá, los médicos intentaron operarlo para corregir los problemas de corazón y pulmones, pero descubrieron una bacteria en la sangre que impedía la cirugía. La bacteria comprometía el sistema inmunológico del bebé, por lo que debía ser alimentado con cuidado mientras combatían la infección.
Finalmente, a los nueve meses, se pudo llevar a cabo la cirugía. Sin embargo, el niño permaneció en coma durante otros dos meses, y los médicos llegaron a sugerir que lo mejor sería desconectarlo. Luz, con el dolor que sólo una madre puede conocer, se negó a rendirse. «Ya no luchemos más, muchacha, despréndase de él», le dijo el médico, pero Luz decidió encomendarse a Dios. Esa misma noche, su hijo despertó del coma, para sorpresa de todos. A partir de ese momento, el niño empezó a mejorar, y poco a poco le retiraron los equipos médicos, quedando solo con oxígeno hasta que pudo ser dado de alta a los 14 meses.
Sin perder la fe
A pesar de haber salido del hospital, el niño todavía tiene pendiente tres cirugías de las nueve que ya le han realizado. Luz, con una carga emocional y económica abrumadora, vive con sus hijos en una pequeña habitación que renta por 200 mil pesos al mes, ubicada al lado de un caño que emana malos olores insoportables. No pueden mudarse a otro lugar debido a sus limitaciones económicas.
A lo largo de este difícil camino, Luz menciona que ha recibido ayuda de varias personas, entre ellas el exconcejal Arnold Pinilla, a quien describe como “un ángel” que ha llegado en los momentos más difíciles.
Su sueño es abrir una tienda, para poder trabajar desde casa y, al mismo tiempo, estar cerca de sus hijos, especialmente de su pequeño guerrero, que ha demostrado una increíble capacidad de lucha.
Fallecimiento
Desafortunadamente el menor falleció debido a su estado de salud conmocionando al municipio de Acacías y a todas las personas que se involucraron en esta dolorosa historia.
