En la Carrera 4 #4-02, centro de San Vicente Del Caguán

En un lamentable hecho ocurrido en la zona rural de San Vicente del Caguán, Caquetá, una joven perdió la vida en medio de un incendio. La víctima fue identificada como Mayerly Díaz Caviedes, una mujer de 23 años, oriunda de este municipio, quien falleció incinerada tras la quema de un potrero en la finca La Granja, ubicada en la vereda Alto Guaduas.
Un incendio que cobró una vida
Según información preliminar, el incendio se habría originado por una quema de pastizales, una práctica común en la región para la limpieza de terrenos y renovación de potreros. Sin embargo, en esta ocasión, las llamas se salieron de control, atrapando a la joven y ocasionando su trágico fallecimiento. Aún no se ha determinado si Mayerly se encontraba realizando alguna labor en el lugar o si fue sorprendida por el fuego de manera inesperada.
Investigación en curso
Las autoridades locales han iniciado las investigaciones para esclarecer las circunstancias exactas del incidente. La comunidad de Alto Guaduas se encuentra consternada por la tragedia y ha manifestado su preocupación por los riesgos de esta práctica agrícola cuando no se toman las medidas de seguridad adecuadas.
Llamado a la prevención
Este trágico suceso ha generado un llamado de atención sobre los peligros de las quemas de potreros sin control. Organismos de socorro han reiterado la importancia de implementar medidas preventivas, como la creación de cortafuegos, la supervisión constante de las llamas y la sensibilización de la comunidad sobre los riesgos de este tipo de prácticas. También han enfatizado en la necesidad de contar con brigadas de emergencia en las zonas rurales para actuar de manera rápida y efectiva ante cualquier incidente, evitando así que se propaguen y causen daños irreparables.
Solidaridad con la familia de la víctima
La comunidad y las autoridades locales han expresado sus condolencias a la familia de Mayerly Díaz Caviedes, lamentando profundamente su fallecimiento. Este medio de comunicación se une al dolor de sus seres queridos y extiende un mensaje de solidaridad en estos momentos difíciles.
Mientras avanza la investigación, se espera que este lamentable incidente sirva como reflexión sobre la necesidad de extremar precauciones en el manejo del fuego en zonas rurales, evitando tragedias similares en el futuro. Es crucial que las comunidades sean capacitadas en el uso seguro del fuego y que se establezcan protocolos más estrictos para las quemas controladas. La implementación de campañas educativas y normativas locales más rigurosas podría prevenir incidentes de esta magnitud.




