Un indignante hecho ocurrió dentro de la parroquia de Ramiriquí, en el momento que el párroco oficiaba una Eucaristía y los fieles se encontraban en oración.
Pues al parecer, ‘Sonia’ no tenía ninguna intención de pedirle a Dios, si no de llevarse un gran botín.
Fue así como aprovechándose de que la iglesia se encontraba llena, y las personas estaban amontonadas, comenzó con el famoso cosquilleo, con el fin de hurtar las pertenencias personales de los fieles como billeteras y celulares.
Se percataron
A los pocos segundos de este hecho delincuencial, la comunidad se percató de que habían sido robados, por lo que pusieron la denuncia frente a la Policía para que lograran dar con la ladrona.
Fue así como con apoyo de la comunidad, la Policía de Boyacá capturó a la mujer en vía pública, donde al practicarle un registro le hallaron en su poder tres carteras y un teléfono celular, los cuales fueron devueltos a sus propietarios.
Por su parte, la mujer fue puesta a disposición de la Fiscalía por el delito de hurto, mientras que los fieles regresaron a la Eucaristía.
Ante el hecho, las autoridades pidieron a la comunidad cuidarse cuando se encuentren en multitud, guardando sus objetos personales en sitios de difícil acceso para los delincuentes.



