Un aparatoso accidente se presentó en altas horas de la noche del pasado viernes 5 de noviembre en el túnel de la calle 26 entre carreras 6ª y 7ª, en el que un motociclista, conduciendo en exceso de velocidad, habría chocado su vehículo contra el muro que queda bajo el puente, perdiendo inmediatamente la vida por el duro golpe que habría sufrido en su cabeza.
Indagación
Testigos del impetuoso estrellón señalaron que el hombre, de entre 25 y 30 años, habría excedido los límites de velocidad, por lo que habría chocado contra el muro que queda justo debajo de la carrera 7ª por la calle 26, en el corazón de Bogotá, perdiendo la vida en el impacto.
Se descarta mezcla con alcohol
La indagación preliminar de las autoridades policivas y forenses que se acercaron para acordonar la zona y realizar el traslado del cuerpo sin vida del joven, descartan por ahora que se tratara de un siniestro vial producto de conducir en estado de embriaguez.
Pruebas forenses
El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación realizó el levantamiento del cuerpo sin vida del joven, que pereció instantáneamente en el aparatoso choque. Luego, fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, con el fin de realizar las pruebas vía necropsia aplicables al caso y corroborar la hipótesis del exceso de velocidad o establecer si además existió alguna falla mecánica u otra causa no estudiada hasta ahora.
Lamentables cifras
En lo corrido del 2021, se han registrado la muerte de más de 120 motociclistas que, según el coronel Héctor González Ríos, comandante de la Seccional de Tránsito y Transporte de Bogotá, es una cifra muy alta en comparación con los años inmediatamente anteriores, por lo que se sugiere prudencia en la vía, conducir en sobriedad y revisión constante de los automotores.
Recomendaciones de la Policía
Un informe presentado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial señala que en los últimos cuatro años se han presentado alrededor de 7.500 siniestros viales en Bogotá, que en el caso de estos actores como principales causantes, relacionan causas directas con exceso de velocidad y falta de una juiciosa revisión técnico mecánica, trámite que se debe realizarse por primera vez a los dos años de haber sido expedida la matrícula y luego de forma anual.




