El científico colombiano Manuel Elkin Patarroyo, conocido por sus investigaciones sobre vacunas, ha muerto este jueves a los 78 años. Oriundo del pequeño municipio de Ataco, en el departamento del Tolima, Patarroyo fue uno de los científicos más conocidos del país. Galardonado en 1994 con el Premio Príncipe de Asturias por su labor científica, y en 2010 con el Premio Sabino Arana, fue reconocido en los años noventa como descubridor de la primera vacuna sintética contra la malaria, cuyos derechos cedió a la Organización Mundial de la Salud. “Su legado está representado, más que en la primera vacuna sintética del mundo, en una generación de investigadores a quienes inculcó el valor de construir país, generando conocimiento”, dice el comunicado de la Universidad Nacional, donde Patarroyo fue profesor desde 1972, que ha dado la noticia de su deceso.
Patarroyo, quien fue nominado un par de veces al Premio Nobel por sus investigaciones, nació en el sur del Tolima en 1946, cuando la violencia entre conservadores y liberales desplazó a miles de familias, como la suya. Los Patarroyo se desplazaron al municipio de Girardot (Cundinamarca), donde el futuro investigador se educó y donde empezó a leer por primera vez sobre Louis Pasteur y el potencial de las vacunas. “Luego llegaron Robert Koch y su lucha contra la tuberculosis, Armauer Hansen y su lucha contra la lepra y Ronald Ross y su batalla contra la malaria. Desde entonces, Patarroyo decidió que quería convertirse, como sus héroes animados, en científico y desarrollador de vacunas”,




