Mr. Bean, creado por Rowan Atkinson junto al guionista Richard Curtis, debutó en la televisión británica en 1990 y hasta 1995 emitió tan solo 15 episodios. A pesar de su limitada producción, el personaje se convirtió en uno de los más recordados de la comedia inglesa.
La estructura del programa era peculiar: no era una serie convencional con temporadas de muchos capítulos, sino especiales producidos de vez en cuando. Algunos años solo tenía dos o tres episodios, cada uno dividido en varios actos de sketches cómicos.
El episodio final se emitió el 15 de diciembre de 1995 bajo el título The Best Bits of Mr. Bean, un especial recopilatorio que reunió los momentos más memorables del personaje.
Pese a la escasez de episodios, Mr. Bean logró un alcance gigantesco gracias a su humor físicamente expresivo, casi sin diálogo, lo que permitió que el humor trascendiera idiomas y culturas. Además, luego del cierre de la serie original vinieron películas, versiones animadas y numerosas emisiones internacionales.