En las últimas horas se dio a conocer acerca del hallazgo del cuerpo sin vida de una persona preliminarmente identificada como Franco Alirio Bravo, de aproximadamente 35 años de edad en inmediaciones del corregimiento de Tajumbina en el municipio de La Cruz, departamento de Nariño. Es de recalcar que por el momento se desconocen las causas de su deceso, sin embargo, serás las autoridades las encargadas de determinarlas y de hacer un pronunciamiento oficial.
El hallazgo, que ocurrió al parecer en horas de la tarde, generó una ola de angustia y desconcierto entre los pobladores del corregimiento de Tajumbina en la vereda El Salado, quienes conocían a Bravo como un hombre trabajador y reservado. Fue un llamado de emergencia lo que alertó a las autoridades locales de la Defensa Civil, quienes dando seguimiento a la información suministrada acudieron al sitio señalado por la comunidad, donde finalmente establecieron que el hombre no tenía signos vitales y por consiguiente se procedió a realizar los actos urgentes.
Funcionarios encargados del procedimiento realizaron el levantamiento del cadáver bajo estrictos protocolos de bioseguridad, trasladando posteriormente el cuerpo al Hospital El Buen Samaritano del municipio de La Cruz, donde se le practicó la necropsia de rigor con el objetivo de establecer las causas exactas de su muerte, que hasta el momento no han sido esclarecidas públicamente.
Aunque no se han revelado detalles que indiquen si se trató de un hecho violento, las autoridades no descartan ninguna hipótesis, esto teniendo en cuenta que se encuentran en un proceso de recopilación de información y con base al análisis forense determinarán las causas del deceso del hombre de 35 años de edad.
La comunidad, entre lágrimas y con el corazón encogido, expresa su dolor por la pérdida de un miembro querido y conocido. Vecinos y allegados han manifestado su consternación, afirmando que Franco no había reportado amenazas ni conflictos que pudieran presagiar un desenlace tan trágico.
Con este lamentable suceso, se reaviva el debate sobre la seguridad en las zonas rurales del municipio, donde los recursos para la atención de emergencias y el esclarecimiento de crímenes suelen ser limitados. La comunidad exige mayor presencia institucional y acompañamiento en estos momentos de crisis.
