Durante la visita del ministro de Salud y Protección Social, Guillermo Alfonso Jaramillo, al hospital de Puerto Gaitán, se evidenció que varios pacientes estaban siendo remitidos a Villavicencio, a pesar de poder ser atendidos en el municipio.
Esta situación no solo afecta gravemente la atención y pone en riesgo la vida de las personas, sino que además contribuye a la congestión de camas en el hospital de Villavicencio.
La polémica
Ante el grave panorama, el ministro arremetió contra la gerente de la ESE Departamental, María del Carmen Rodríguez. El funcionario fue grabado increpando con lenguaje soez a funcionarias de la Empresa Social del Estado (ESE) local. En el video, Jaramillo expresa: “Ojalá le tocara a usted, se enfermara y no tuviera familia, hijueputa y la mandaran para Villavicencio o para Bogotá, para que tuviera que ir detrás su familia”.
¿Violencia de género?
Frente al polémico episodio, la gobernadora del Meta, Rafaela Cortés, le salió al paso al ministro a través de su cuenta de X, sentando su voz de protesta por la forma en que el funcionario le habló a una mujer. Incluso, la mandataria citó el reciente caso donde un sujeto le arrebató la vida a dos mujeres en ese mismo municipio, “¿este es el ejemplo que usted le quiere dar a otros hombres?”, expresó la mandataria.
Cortina de humo
Ante el pronunciamiento de la gobernadora, la reacción de los metenses no se hizo esperar. Su trino fue incluso catalogado como una cortina de humo que pretenden tapar la crítica situación en salud que afrontan municipios como Puerto Gaitán y las falencias en el sistema judicial que, son justamente la causa de que, el homicida de las dos mujeres en Puerto Gaitán hoy se encuentre libre, pues a pesar de que, este sujeto confesó su crimen, no se contaba con una orden de captura y no pudo ser privado de la libertad, llevando a que ahora, se tenga que ofrecer una recompensa de 30 millones de pesos para poder dar con su paradero.
Adicionalmente, los pobladores han cuestionado las pocas acciones para contrarrestar la violencia de género en el departamento, llegando incluso a señalar que, infortunadamente se está usando este flagelo, como excusa de algunas mujeres en el ámbito político para evitar responder por malas actuaciones.




