La operación conjunta ‘Amazonía Libre II’, realizada entre Colombia y Brasil, representó uno de los golpes más importantes contra la minería ilegal en la región amazónica durante 2025. La intervención tuvo como objetivo frenar la extracción criminal de oro y reducir el grave daño ambiental que estos grupos vienen causando en uno de los ecosistemas más frágiles y estratégicos del planeta.
El operativo fue ejecutado por la Policía Nacional de Colombia, la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), la Comisión de Coordinación Policial Internacional (CCPI) y la Policía Federal de Brasil, desplegando 92 uniformados especializados, tres helicópteros UH-60 y equipos tácticos para intervenir zonas de difícil acceso en la selva.
Durante la intervención, las autoridades destruyeron infraestructura clave para la explotación ilegal de oro: 14 dragas, 33 motores, 3 remolcadores, 1 excavadora, 4.800 galones de combustible y 2,5 kilos de mercurio, insumos que permitían la extracción mensual de alrededor de 6.000 gramos de oro, equivalente a USD 9,3 millones por mes en ganancias para grupos criminales. Según el Ministerio de Defensa, esto representa un golpe directo a rentas ilícitas por más de 12.000 millones de pesos.
Además del impacto económico, el operativo evitó daños graves al río Puré, un territorio biodiverso que alberga especies emblemáticas como el delfín rosado, el jaguar y el manatí amazónico. También se protegió el hábitat de la que se considera la última tribu no contactada del país, altamente vulnerable a cualquier perturbación externa.
Este tipo de operaciones refuerza el compromiso binacional de Colombia y Brasil de enfrentar las economías ilegales que destruyen la Amazonía, especialmente en un contexto donde los gobiernos buscan proteger los ecosistemas y apoyar a las comunidades locales. El Ministerio de Defensa destacó que estas acciones forman parte de una estrategia más amplia para garantizar seguridad, defensa del ambiente y protección de la vida en la región amazónica.



