Un millonario robo se perpetuo en el Centro Histórico de la ciudad de Tunja, dejando perplejos a los comerciantes de la zona.
Hechos
Eran alrededor de las 9:30 de la mañana cuando dos sujetos se acercaron a El Super Boom sin levantar muchas sospechosas, ya que tenían uniforme de trabajadores y con unas llaves hechizas, lograron entrar al establecimiento sin levantar pesquisas.
Ya adentro del establecimiento, los delincuentes rompieron los cables de las cámaras de seguridad para luego dirigirse a la caja registradora y hurtar aproximadamente 25 millones de pesos, producto de las ventas de cuatro días, ya que al parecer el dueño del sitio había salido de viaje y había dejado encargado a uno empleados.
Como si no fuera suficiente, los ladrones se digirieron a la oficina privada del dueño para encontrar la caja fuerte y robar los elementos de valor que allí guardaban.
Luego rápidamente desaparecieron del lugar sin dejar rastro.
Atención
Al rato, una llamada alertó a la Policía Metropolitana, quien llegó con algunos uniformados, quienes acordonaron el sitio y realizaron las debidas investigaciones.
Según el reporte de las autoridades, hacia fala el cajón de la caja registradora con $200.000, también un bolso color café con $20 millones de pesos en efectivo el cual estaba en uno de los cajones de la barra de pago, también hacía falta una caja fuerte la cual contenía elementos de valor y el DVR de sistema de video vigilancia del local.
Indicó también la Policía que por este hecho no fue posible encontrar a los responsables, por lo que no hay capturas, y que por ahora solo se está adelantando la investigación, ya que al parecer algunos empleados podrían ser los mismos responsables.
Reacciones
Por su parte, allegados indicaron que al parecer cuando los delincuentes estaban ingresando al establecimiento, dos patrullas pasaron por al frente, sin que les hayan realizado una requisa o tomado, antecedentes.
También comerciantes mostraron su indignación por el millonario robo que se dio a media cuadra de la estación de Policía de la Metropolitana.
Dicen que es increíble que estas cosas ocurran muy cerca de la Policía y que temen por sus negocios, principalmente los fines de semana, cuando la mayoría están cerrados, por lo que pidieron mayores controles y patrullajes reales para evitar este tipo de acontecimientos.
