Unos 20 migrantes originarios de la provincia de Azuay, en Ecuador se encuentran entre un grupo de 60 ciudadanos que desde la semana pasada permanecen retenidos en las instalaciones del Aeropuerto Internacional de Monterrey, en México.
Entre ellos hay niños y adolescentes, cuyos padres o representantes han solicitado a las autoridades migratorias de ese país que sean trasladados a un área exclusiva para prevenir el contagio de Covid-19.
La situación empeora cada día. Adultos y menores de edad, duermen sobre el suelo sin el distanciamiento que se requiere por la emergencia sanitaria. Además, no tienen comida ni agua suficiente; tampoco un espacio para el aseo personal.
Todo esto se conoce por testimonios de algunas personas quienes han levantado su voz de clamor. Dicen que penas han logrado comunicarse con sus familiares en Ecuador, pues están prácticamente incomunicados.
Testimonios
Uno de los retenidos es Franco, de Cuenca, Ecuador quien, según su sobrina, viajó el 19 de agosto desde el aeropuerto Internacional de Cotopaxi hasta México.
De acuerdo con su familiar, el ciudadano cumplió con todos los requisitos que exige el Gobierno de México y fue como turista.
Según su allegada, en los planes de Franco no estaba quedarse en ese país, como lo hacen miles de ecuatorianos, que buscan cruzar ilegalmente a Estados Unidos.
Marlene Vallejo, de Girón, cuyo hijo Ismael también está retenido, considera que se trata de abuso y discriminación, porque no les ofrecen un lugar digno para permanecer mientras se resuelve su situación migratoria.




