Un niño de nueve años que sufría golpizas por parte de su progenitor y vivía en condiciones de vulnerabilidad fue puesto en custodia del ICBF.
La comunidad del barrio Malvinas, ubicado en la ciudad de Villavicencio, llamó a las autoridades, quienes llegaron y atendieron un caso de aparente maltrato infantil, donde la víctima era un menor de apenas 9 años, al cual sacaron del inmueble y dejaron a disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
Intervención
Sobre las 12:30 de la noche del viernes, voces de auxilio y llanto alertaron a la comunidad, quienes salieron de sus casas a verificar lo que estaba sucediendo ya que los sonidos parecían provenir de un niño.
Así que se desplazaron y llegaron hacía un improvisada vivienda, ubicada en el fondo de dicho sector, evidenciando que un niño necesitaba ayuda, de esta manera llamaron a la línea de emergencia.
Minutos después llegaron patrullas de Infancia y Adolescencia para atender el caso, fue así como agentes especializados ingresaron a la vivienda evidenciando el estado deplorable en el que estaba viviendo un niño de tan solo nueve años.
Al ingresar los uniformados, el infante se encontraba angustiado y sentado en una cama ubicada debajo de una teja de lata oxidada, la cama en donde permaneció estaba mojada debido a las lluvias y a que el agua se filtraba por el improvisado techo.
De manera inmediata evacuaron al menor de la vivienda y lo trasladaron hacía una unidad del ICBF, donde fue puesto bajo cuidados médicos y psicológicos. En medio del operativo el padre del menor se mostró obstinado y pedía a los agentes que no se lo llevaran de la vivienda.
Víctima
Según los vecinos que avisaron a la policía, el hombre venía maltratando al pequeño desde hace varias noches, de hecho los denunciantes testificaron a los agentes encargados del caso, que la noche anterior el menor había sido golpeado tan fuerte que su rostro estaba ensangrentado.
Afirmaron que el menor ya había sido quitado de la custodia del hombre, pero que el Bienestar Familiar lo había entregado a un familiar el cual lo había vuelto a dejar en manos del padre maltratador.
También se pudo establecer que el niño estaba viviendo en condiciones insalubres y precarias, ya que la vivienda de donde fue rescatado no contaba con techo, baño, era un lote con paredes a la mitad, y dentro de este se encontraba basura y reciclaje, además lo que parecían botellas de bóxer.
Entre tanto el menor permanece en inmediaciones del Bienestar, la comunidad exige que el menor no sea devuelto a su progenitor ya que no es una persona apta para cuidarlo.
