Un niño de dos años llamado Noah Langlois fue diagnosticado con un tumor maligno en el hígado que no respondió a tratamientos de quimioterapia convencionales. Tras ello, fue trasladado al Hospital Infantil Holtz en Miami, donde formó parte de un procedimiento médico innovador que no se había usado antes en menores.
El doctor Juan Pablo Solano, pediatra colombiano formado en la Universidad Nuestra Señora del Rosario, integró el equipo médico encargado del caso. El tratamiento implicó la utilización de microesferas de itrio, unas partículas muy pequeñas que se introdujeron mediante un catéter desde la pierna hasta las arterias que irrigan el tumor, para atacar directamente la lesión.
Noah permaneció hospitalizado durante 207 días hasta que fue dado de alta, gracias a la respuesta positiva al nuevo tratamiento. Si bien muestra mejoría, los médicos advierten que todavía es necesario mantener revisiones constantes, pues existe la posibilidad de recurrencia del tumor o complicaciones derivadas del trasplante hepático que podría necesitar en el futuro.
